Ayer fue nuestro último día en Gaza y pudimos conocer de primera mano la situación de las mujeres en materia de salud y acceso al empleo. Visitamos el centro de salud del campamento de refugiados de Beach (ciudad de Gaza), que atiende aproximadamente a 1.100 pacientes al día. La situación política que vive la franja de Gaza está teniendo un fuerte impacto en la salud psicosocial de la población, especialmente entre las mujeres y los niños y niñas.
La violencia de género sigue siendo uno de los principales problemas para las mujeres en la zona. Este centro de salud ha desarrollado un sistema de detección y referencia de la violencia de género, realmente innovador en la Franja. Es un modelo integral en el que trabajan las distintas áreas de salud de UNRWA. El principal problema es la detección de la violencia, por ello UNRWA ha transversalizado esta problemática en todo el sistema de salud para que trabajadores y trabajadoras de los distintos centros y programas puedan detectarla, y animen a las mujeres a pedir apoyo psicosocial en el centro.
También hemos tenido la oportunidad de compartir un espacio con mujeres integrantes del programa de “Jóvenes líderes”, financiado por la Agencia Vasca de Cooperación. El programa pretende favorecer la entrada al mercado laboral de las mujeres jóvenes a través de formación y la posibilidad de realizar prácticas en empresas y/o organizaciones. Algunas de las mujeres que participan en el programa nos han contado cómo les ha ayudado a romper barreras psicológicas, les ha ofrecido la posibilidad de salir de sus casas y les ha hecho ganar mayor confianza en sí mismas, además de desarrollar distintas habilidades administrativas.
Vuelta a Jerusalem
Tras dos días y medio en Gaza, aprendiendo del esfuerzo y la ilusión de organizaciones que apuestan fundamentalmente por los derechos de las mujeres, hemos vuelto a Jerusalem. Hemos vivido muchas emociones y contrastes en estos dos días, que son muy difíciles de plasmar en una crónica.